purina vetcenter image

Bacterias intestinales en cachorros e inmunidad en la madurez

El objetivo de este estudio era explorar el desarrollo de la microbiota intestinal en 168 perros Pastor Alemán (30 camadas) desde las 7 semanas y hasta los 18 meses de edad y, además, estudiar el efecto de afinidad, composición de la microbiota materna y entorno de vida en una población grande y bien definida de perros. Mediante secuenciación 454 , evaluamos los efectos de los suplementos pre y posnatales con probióticos (Lactobacillus johnsonii NCC533 (La1))y analizamos si la administración de la cepa de probiótico influía en la composición de la microbiota fecal en un estudio doble ciego con control con placebo. Las perras recibieron probiótico o placebo durante el último tercio de la gestación y hasta que sus cachorros tenían 8 semanas de edad, y los cachorros recibieron el mismo tratamiento que sus madres entre las 3 y 12 semanas de edad. Se obtuvieron muestras de las perras gestantes los días 42, en el parto, 4 semanas después del parto y 7 semanas después del parto, y de los cachorros a las 4 y 7 semanas de edad, a los 12-13 meses y a los 15-18 meses. Se analizaron las respuestas de anticuerpos séricos IgA, IgE séricos totales, e IgA y IgG fecales frente al virus del moquillo mediante ELISA para poder detectar cualquier efecto estimulante de la inmunidad de la cepa probiótica. El análisis de la composición de la microbiota fecal reveló que los filos predominantes eran los mismos en los cachorros de 7 semanas de edad y en las perras gestantes y lactantes (Firmicutes, Fusobacteria, Bacteroidetes). Las proporciones entre las distintas bacterias así como la diversidad variaron en los cachorros a partir de las 7 semanas y hasta los 15-18 meses de edad. Los hermanos de camada tenían microbiotas fecales más parecidas en comparación con los no emparentados y los cachorros de 7 semanas de edad eran más similares a sus madres que a las madres no emparentadas a las 7 semanas después del parto, pero no en el momento del parto. Observamos un cambio en la abundancia relativa de las distintas bacterias durante la lactancia, y un incremento de la diversidad desde la gestación y hasta el final de la lactancia. La diversidad microbiana se vio afectada por el área en la que vivían los perros, con los perros de grandes ciudades con una mayor diversidad que los que vivían en el campo. Sin embargo, no pudimos demostrar ningún efecto de la exposición pre ni posnatal a Lactobacillus johnsonii NCC533 (La1) en cuanto a la diversidad o la composición de la microbiota o los niveles de IgA sérica, IgE sérica total, IgA fecal o respuesta a la vacuna. Nuestros hallazgos proporcionan una mejor comprensión de la microbiota fecal canina en perros en crecimiento así como en perras lactantes y gestantes. Esta información sirve de base para futuras investigaciones sobre la conexión entre la colonización intestinal temprana y la función inmunitaria en la madurez. © 2018 Vilson y otros